Entonces estamos acá, y como dijo John F. Kennedy en uno de sus recordados discursos; cuando dimos el primer paso de este viaje no lo hicimos porque iba a ser fácil, sino por que era difícil. Eso fue el 28 de Agosto de 2015, en 2020.
Navegando en las desconocidas aguas de uno de los años más extraños y complejos de la humanidad desde la segunda guerra mundial. Puedo mirar atrás y decir que el rumbo que tomamos en este contexto y en Argentina en particular era el correcto.
Un viaje puede planificarse hasta el más mínimo detalle cuando uno supone que sabe desde dónde parte y a dónde quiere llegar. La verdad, es que no importa cuánto te hayas preparado antes y donde creas que estás yendo. Afuera del powerpoint la expectativa se choca con la realidad, transformando un viaje en avión con múltiples escalas en una odisea digna de Ulises. Sin embargo, mirando cinco años para atrás, creo que lo importante fue no perder de vista la idea general, seguir rodando con la mochila de la experiencia en la espalda, recalcular y seguir caminando.
No hay secretos para el éxito. Es el resultado de la preparación, el trabajo duro y el aprendizaje del fracaso.
PAUL TOURNIER
Lo importante no es llegar, es disfrutar el camino
Sin perder el curso trazado y con el GPS puesto en la visión de ese destino que queremos alcanzar, puedo decir que este año más que ningún otro y a pesar de todas las turbulencias de contexto, nunca estuve más seguro de ese lugar al que queremos llegar y que cosas necesitamos en la mochila para seguir en camino.
Por supuesto, es imposible saber cómo y cuándo llegaremos, pero si toda travesía empieza con un primer paso, hemos andado una buena parte del camino. Finalmente no importa llegar, es mejor disfrutar el viaje, seguir aprendiendo en el proceso y construir una experiencia colectiva que deje una huella memorable ¡A seguir andando, lo mejor está por venir!